CARTA PASTORAL EN CONMEMORACIÓN DE LOS 504 AÑOS DE LA REFORMA “VIVIR EN LA LIBERTAD GANADA EN CRISTO EN TIEMPOS DE POLARIZACIÓN”

CARTA PASTORAL EN CONMEMORACIÓN DE LOS 504 AÑOS DE LA REFORMA “VIVIR EN LA LIBERTAD GANADA EN CRISTO EN TIEMPOS DE POLARIZACIÓN”
Estimados hermanos, estimadas hermanas en Cristo:
En este nuevo aniversario de la Reforma, les saludo con las palabras del Apóstol Pablo a la Comunidad de los Gálatas 5: 1 “Cristo nos dio libertad para que seamos libres. Por lo tanto, manténganse ustedes firmes en esa libertad y no se sometan otra vez al yugo de
la esclavitud”.
Las palabras del Apóstol Pablo nos señalan y nos recuerdan que Cristo nos liberó para vivir en libertad, y nos exhortan a mantenernos firmes en esta libertad y no someternos otra
vez al yugo de la esclavitud. En tiempos tan complejos y de tanta polarización en nuestro país, estas palabras bíblicas nos desafían y nos inspiran en nuestra vida y testimonio de fe.
En la conmemoración y celebración de los 500 años de la Reforma, junto a la Comunión Luterana Mundial afirmábamos que somos libres por la gracia liberadora de Dios, es decir, Dios por medio de su gracia nos libera de las obras y de nuestros méritos para vivir en
libertad por medio de la fe.
Somos libres por medio de la fe y siervos/siervas por medio del amor. Esta libertad tan característica de nuestra doctrina luterana nos invita a dar testimonio del amor de Dios en un mundo sufriente y marcado por la falta de amor. La libertad ganada en Cristo nos interpela a levantar nuestras voces frente a todo sistema que busca imponer cargas pesadas sobre la vida de las personas y someterlas a una vida llena de esclavitudes.
Estamos en un tiempo en que crece la polarización y la falta de diálogo entre nosotros y nosotras. En este contexto, como iglesia heredera de la teología de la Reforma somos llamados y llamadas a vivir y dar testimonio de nuestra libertad en Cristo, y desde esta libertad trabajar por la paz y por la dignidad de todas las personas, sin acepción.
Nuestro país vive un momento histórico bellísimo y de mucha esperanza: decidimos a través de un plebiscito que era necesario cambiar nuestra constitución para poner fin a una cadena de esclavitudes y construir un país más justo y solidario, donde la paz y una vida digna sean derechos para todos y todas.
Las transformaciones sociales y culturales no son procesos fáciles, así como no es nada fácil vivir en la libertad que Dios nos dio. Es común en tiempos de transformaciones y cambios sociales surjan discursos fundamentalistas y de odios que buscan instalar en
nuestras vidas miedos y generar polarización. Las palabras del Apóstol Pablo nos muestran que Cristo nos liberó del yugo del pecado, de nuestro egoísmo, del legalismo moralista, de nuestras verdades absolutas que buscan esclavizar a otros y otras.
Qué tremendo y contradictorio, nosotros y nosotras como cristianos y cristianas que profesamos esta libertad en Cristo, una y otra vez caemos en la tentación de usar la libertad ganada en Cristo para crear opresión y discriminación, para negar libertades a quienes no piensan como nosotros y nosotras.
Cristo nos liberó para amar y servir al mundo. En este momento tan especial que estamos viviendo como país, busquemos trabajar por la paz, por la justicia, por el diálogo y por las transformaciones que nuestro país necesita para que todos y todas podemos disfrutar de
una vida digna y vivir en libertad y diversidad. Hagamos cada uno/una nuestra parte, mantengámonos firmes en la libertad que Cristo nos regaló y no nos sometamos otra vez
al yugo de la esclavitud.
Que Dios en su gracia liberadora nos ayude a vivir y dar testimonio de esta libertad que tenemos en Cristo, a amar y servir. Que Dios nos libre de caer en la tentación de hacernos esclavos/as de nuestras verdades, egoísmos y falta de amor.
Un cordial saludo y una bendecida conmemoración de los 504 años de la Reforma en comunidad.
Pastora Izani Bruch
Obispa-IELCH

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Contacto

OBISPADO Y OFICINA ADMINISTRATIVA

Obispa: Rvda.Izani Bruch

Presidente: Pablo Ríos

Dirección Postal: Juan Enrique Concha 121, Ñuñoa

Teléfono: +56 2 22233195

E-mail: oficinasinodal@ielch.cl