Durante el mes de junio en todo el mundo se conmemora el mes del orgullo de las personas LGBTI+. Esta fecha nace de una de las primeras acciones públicas de reivindicación de derechos de la diversidad sexual ocurrida hace 55 años en Nueva York.
Sin embargo, aún hay personas que son rechazadas en muchas comunidades de fe y sufren violencia de distinto tipo, por eso, como cristianos luteranos estamos invitados a visibilizar nuestra voluntad de ser espacios acogedores de la diversidad y mostrar, así, el amor de Dios para todas, todos y todes.
Nuestra acogida no es condescendiente ni caritativa, sino celebratoria. Somos una iglesia diversa y damos gracias a Dios por eso. Queremos ofrecer un espacio seguro para vivir la fe desde la diversidad cultural, sexual y de géneros. La diversidad no es un error ni un pecado, sino que es parte del plan de Dios para su creación.
“Ninguna persona es un problema, ninguna persona es una cuestión. Las personas están hechas a imagen de Dios. Todos y todas nosotros y nosotras sin excepción somos amados y llamados en Cristo. No hay problemas o cosas, simplemente hay personas. El camino a seguir debe estar basado en amor y en alegría, en celebración de nuestra humanidad, de esta creación a imagen de Dios, de esta pertenencia a Cristo”, (Sermón del 17 de mayo en el Día contra la LGBTI+ fobia).
Mira aquí el video de la Pastoral de la Diversidad Sexual por el mes del orgullo: