El sábado 16 de diciembre la Pastoral Migrante de la Iglesia Evangélica Luterana en Chile, conmemoró el Día Internacional de las y los migrantes. El Culto se realizó en el templo de la Congregación Belén en San Bernardo, e incluyó el bautismo de cuatro nuevas integrantes: María Ester, Charianny, Nereida y Natalia.
El Rvdo. Jan Meyer, coordinador de la Pastoral, recordó que en Adviento preparamos la venida de Jesús, aunque muchas veces nos enfrentemos a su rechazo. Los relatos de los evangelios muestran que tanto en su nacimiento, como en su vida pública, el Hijo de Dios tuvo que hacer frente a quienes no querían oírlo. Pero de igual modo vino y sigue viniendo, también para los migrantes.
La obispa Izani Bruch estuvo presente en el Culto, e hizo una plegaria por quienes se encuentran en movilidad: “Dios Padre Madre, nadie es extranjero para ti, y nadie va nunca lejos de tu cariño. Clamamos a ti. Cuida de las y los migrantes, refugiados, y solicitantes de asilo. Cuida de los que están separados de sus seres queridos, cuida de los que están perdidos, de los que han sido exiliados de sus hogares”.
“Llévalos en condiciones seguras al lugar donde quieren estar. Clamamos a Ti, envía tu Espíritu Santo sobre nuestros gobernantes para que promulguen leyes y políticas acordes con la dignidad de toda persona humana. Concédenos la gracia de una santa audacia para ser solidarios y solidarias con los más vulnerables entre nosotros y nosotras, y para ver en ellos y ellas el rostro de tu hijo”, expresó Bruch en la oración.