En el Centro de Conferencias ICE en Cracovia, comenzó este 13 de septiembre la Decimotercera Asamblea de la Federación Luterana Mundial. El servicio de apertura fue acompañado por un coro de parroquias locales que cantaron himnos de todo el mundo, uniendo a través de la música a las 150 Iglesias miembro que participan en la reunión.
Durante la liturgia, cada región fue invitada a llevar un regalo de pan y sal, símbolos tradicionales de la hospitalidad en la cultura polaca.
La Rvda. Danielle Dokman, de la Iglesia Evangélica Luterana en Surinam, predicó sobre el viaje de los Reyes Magos (Mateo 2: 1-12) y su relación con el lema de la Asamblea: “Un Cuerpo, Un Espíritu, Una Esperanza”.
Dokman relacionó la temática del Cuerpo con el Evangelio, porque los magos buscan a un niño que encarna la vulnerabilidad humana. Sobre el Espíritu, expuso que aunque no es mencionado directamente, está en toda la escena “porque hay movimiento”. Y sobre la Esperanza, es la presencia de Dios en medio de los contextos de opresión. «Nos hemos reunido aquí desde varios continentes para experimentar el amor perdurable y permanente de Dios», afirmó.
La obispa Izani Bruch, de la Iglesia Evangélica Luterana en Chile, comentó que “está siendo un evento maravilloso, donde uno ve cómo va aconteciendo la unidad y la comunión en la diversidad que somos como comunión luterana mundial. Estamos muy expectantes en cómo va a acontecer esa unidad, para que así podamos ser una voz común para dar esperanza frente a este mundo tan fragilizado y fragmentado».
Anna Wrzesinska, presidenta del Comité de Planificación de la Asamblea Local de la Iglesia Evangélica de la Confesión de Augsburgo en Polonia, señaló que si bien en los cuatro años de preparativos hubo muchos desafíos, se sintió diferente cuando llegó el momento de la apertura de la Asamblea.
Wrzesinsak invitó a los participantes a «animarse, compartir y aprender unos de otros» y a apoyarse mutuamente en los próximos días.
Fuentes:
Texto: LWI/ Redacción
Foto: Red de Comunicaciones – LAC
