El Consejo Mundial de Iglesias (CMI) conmemoró en Ginebra su 75º aniversario con una celebración ecuménica en la catedral reformada de san Pedro. El acto recordó su creación en Ámsterdam en agosto de 1948, tres años después del final de la Segunda Guerra Mundial.
“La gente se reunió en Ámsterdam, en 1948, con el claro propósito de unir a las Iglesias del mundo y convertirlas en un instrumento de paz”, dijo el moderador del Comité Central del CMI, obispo Heinrich Bedford-Strohm, de Baviera (Alemania), en su sermón durante el servicio del 25 de junio.
“Declararon claramente que la guerra contraviene la voluntad de Dios y que nuestra tarea como cristianos y cristianas es precisamente la de superar el nacionalismo y otras formas de división entre los pueblos, que acababan provocar esa terrible guerra mundial que se cobró tantos millones de víctimas”, continuó.
“Por eso tenemos que escuchar una y otra vez el testimonio bíblico sobre Cristo”, añadió. “Cristo está presente en nuestra peregrinación del CMI por la justicia, la reconciliación y la unidad. No nos dejará solos. Está, y estará, entre nosotros y nosotras. Está siempre con nosotros y nosotras hasta el fin del mundo”, dijo el moderador Bedford-Strohm.
“Me alegra estar con ustedes en este día y especialmente mientras oramos juntos en este momento tan especial en la vida de este Comité Central y en la vida del CMI en que celebramos nuestro 75º aniversario”, dijo el secretario general del ente, el Rvdo. Prof. Dr. Jerry Pillay.
75 años de los Derechos Humanos
El Consejo recordó además la importancia del 75º aniversario de la Declaración Universal de Derechos Humanos, que se conmemora el próximo 10 de diciembre.
“Al mismo tiempo, reconocemos las muchas maneras y los múltiples lugares en los que la dignidad humana que Dios da se ve amenazada y en peligro por el resurgir de la represión autoritaria de las libertades; por los conflictos, la ocupación y los desplazamientos forzosos; por la discriminación y los prejuicios; por la persecución; por la galopante desigualdad económica y la pobreza extrema persistente; por el extremismo violento; por la desinformación en las redes sociales y la incitación al odio; por el abuso de la inteligencia artificial y otras nuevas tecnologías, y por el cambio climático antropogénico y la ausencia de justicia climática”, manifestaron en un documento.
La misiva invita a las iglesias miembros del CMI y a los asociados ecuménicos a que, entre otras acciones, se comprometan de nuevo “a dar una respuesta compasiva, práctica y activa a las voces, los lamentos y las experiencias vividas de las mujeres, los niños y las niñas, así como los hombres que sufren la violación de su dignidad y sus derechos humanos”.
El Consejo Mundial de Iglesias reconoce los valores compartidos que unen la Declaración Universal con su propia fundación, ambos acontecimientos ocurridos en 1948 y que en estos meses están cumpliendo 75 años.
Fuentes:
Texto: Consejo Mundial de Iglesias/ Redacción
Foto: Albin Hillert/CMI
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El Consejo Mundial de Iglesias conmemora su 75º aniversario orando y celebrando
Declaración del CMI con motivo del 75º aniversario de la Declaración Universal de Derechos Humanos