La Iglesia Evangélica Luterana en Chile saluda al Presidente electo Gabriel Boric Font

Santiago, 20 de diciembre de 2021,

GABRIEL BORIC FONT
PRESIDENTE ELECTO
REPÚBLICA DE CHILE

La Iglesia Evangélica Luterana en Chile le saluda y felicita por su triunfo, y le anima a seguir en el camino iniciado para construir un país más justo, más inclusivo y más respetuoso de todas las dignidades humanas.

Valoramos su disposición para garantizar el pleno respeto de los Derechos Humanos en el país, así como su voluntad para hacer efectivas las garantías de verdad, justicia, reparación y no repetición frente a la violencia, tanto pasada como reciente, ejercida por parte de agentes del Estado.

Apreciamos también la disposición democrática manifestada para escuchar y dialogar, y para construir una paz social no basada en la imposición desde la fuerza, sino que en el necesario reconocimiento del otro y de la otra en el conjunto de diversidades que caracterizan a la sociedad chilena actual.

En este sentido, confiamos que durante su gobierno llegue a buen término la Convención Constitucional; esfuerzo inédito en la historia del país para lograr por medios pacíficos un consenso genuino al servicio de una nueva Carta Fundamental, una que esperamos contribuya al Cuidado de la Creación y de la naturaleza, fortalezca la democracia, amplíe las libertades, garantice derechos, y establezca claros límites frente al abuso de poder.

Nos preocupa especialmente, la persistencia de discriminación en contra de los Pueblos Indígenas; la falta de un diálogo constructivo, resolutivo y con perspectiva histórica con las comunidades del Pueblo Mapuche; y las vergonzosas manifestaciones de racismo, xenofobia y aporofobia que denigran a las poblaciones migrantes y deshumanizan nuestra convivencia.

Conscientes del valor del respeto, de la diversidad de creencias y de visiones de mundo, es que nos despedimos manifestando nuestra voluntad de colaborar en la construcción de un Chile “más ancho y abierto”. Hacemos oración para que su tarea sea fecunda y asiente los cimientos que permitan avanzar por el camino de la justicia, tal como lo expresa el Profeta Isaías:

“Que rompas las cadenas de la injusticia
y desates los nudos que aprietan el yugo;
en que dejes libres a los oprimidos
y acabes, en fin, con toda tiranía;
 en que compartas tu pan con el hambriento
y recibas en tu casa al pobre sin techo;
en que vistas al que no tiene ropa
y no dejes de socorrer a tus semejantes.
Tu pueblo reconstruirá las viejas ruinas
y afianzará los cimientos puestos hace siglos.
Llamarán a tu pueblo:
“reparador de muros caídos”,
“reconstructor de casa en ruinas”.
(Isaías 58: 6-7, 12)

Fraternal y sororalmente,

Pastora Izani Bruch

Obispa de la Iglesia Evangélica Luterana en Chile

 

Lea la Carta Completa aquí

 

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